A veces ni siquiera nosotras mismas soportamos nuestro humor, nuestro día a día.- No se, ya pasará y no es que no tenga nada para hacer, todo lo contrario; estoy «RAyada». Como se decía en la década del 70 cuando tenía 8 años y no entendía a mi abuela, a mi madre o a mis tías que transitaban por este mismo humor.-
En fin: todo llega.-
Ya tejeré y me dejaré de jo….r